Pequeños guerreros que necesitan apoyo para continuar su tratamiento oncológico

TIJUANA, OCTUBRE 10, 2025.- Danya Yicsel Peña, de 5 años, y David Alejandro Ortega, de 13, enfrentan una dura batalla contra el cáncer. Ambos necesitan del apoyo de la comunidad para poder continuar con sus tratamientos oncológicos y seguir luchando por su salud.

La pequeña Danya Yicsel vive junto a sus padres y su hermano menor. Su padre trabaja en una fábrica para mantener a la familia, pero su salario no es suficiente para cubrir los gastos del tratamiento oncológico que la niña necesita.

Yicsel, madre de la pequeña Danya, compartió que todo comenzó cuando su hija empezó a sufrir fuertes dolores abdominales. Preocupada, la llevó a consulta con un médico particular, pero al no mejorar, acudieron a la Clínica 1, donde tampoco lograron identificar la causa.

Desesperados por encontrar respuestas, buscaron apoyo en la Fundación Castro Limón, donde finalmente un especialista les informó que Danya padecía un neuroblastoma, un tipo de cáncer que afecta principalmente a niños pequeños.

“Me dijeron que tenía un neuroblastoma, el tumor ya le estaba robando células a su cuerpo.” Indicó la madre de Danya.

Agregó que, al recibir la noticia de que su hija tenía cáncer, sintió que el mundo se le venía encima. Fue un momento que le cambió la vida por completo, pues aún mantenía la esperanza de que los médicos le dijeran que no se trataba de algo tan grave.

“Para mí fue una noticia muy dura, pues yo estaba con la esperanza de me dijeran que iba hacer otra cosa”.

Añadió que, al enfermarse, Danya dejó de convivir y de ser la niña activa y alegre que siempre había sido, pues el dolor era muy intenso. Sin embargo, con el inicio de los tratamientos, poco a poco volvió a recuperar su energía y su carácter amigable, mostrando nuevamente la actitud que la caracteriza.

Por su parte, David Alejandro Ortega vive con sus padres y sus dos hermanos menores. Su padre trabaja como carnicero en una tienda distribuidora para sostener a la familia.

María Elena, madre del menor, compartió que cuando David tenía 12 años comenzó a presentar sangrados nasales. Preocupados, sus padres lo llevaron al médico para que lo evaluara, y aunque le realizaron una cauterización en el lado izquierdo, el procedimiento no logró aliviar del todo su problema.

Al no obtener resultados positivos, la familia buscó la ayuda de un especialista y acudió a la Fundación Castro Limón, donde, tras realizarle una tomografía, descubrieron que David tenía un carcinoma nasofaríngeo, un tipo de cáncer muy agresivo localizado en la zona de la nariz.

Al enterarse de que su hijo tenía cáncer, María Elena sintió que el mundo se le venía abajo, pues le resultaba imposible aceptar que David estuviera enfrentando una enfermedad tan grave.

“La verdad, yo sentí que mi mundo se venía abajo, yo no me la podía creer, decía mi hijo no, para mí no fue fácil que me dijeran eso”.

Las personas que quieran apoyar a estos pequeños guerreros lo pueden hacer ingresando a la página:

web https://fundacioncastrolimon.org/apadrina/ donde pueden ver los perfiles de los niños y también capturar la cantidad que quieren aportar mensualmente. 

También lo pueden hacer acudiendo a las oficinas de la Fundación Castro Limón o comunicándose al número de WhatsApp 664-117-1577.Fotos José Vargas / Border Zoom